No es un secreto. Total ya lo he dejado entrever en algunas de las líneas de mis posts anteriores, e igual quienes han compartido conmigo de un momento de rocanrol alrededor de unas buenas birras lo saben: me gusta más el rock de antes que el de ahora.
Bueno, quizás eso suene algo radical, entonces suavicémoslo un poquito: los buenos sonidos que para mi concepto abundaban en los 80´s y 90´s cuando ponía una emisora (y que después se iban derechito y hasta con propaganda pa’ unos cassetes grabados y re-grabados), me eran más fácil encontrarlos en esa época que en la actual, aunque claro, hay grandes excepciones.
Afortunadamente cada tanto tiempo surgen buenas bandas, y este post de hoy es el caso. Cuando a veces me han preguntado por ahí en alguna conversación, cuál grupo de los últimos 10 años ha logrado meterse de lleno en mis “anticuados” gustos, a la mente sin pensarlo mucho se me viene un nombre: Godsmack. Lo más particular de mi respuesta interna son mis motivos: heavy metal básico, fuerte actitud rockera en escena y un sonido que me recuerda a héroes de siempre como Metallica o Alice in Chains…lo ven, de vuelta a mis “anticuados” gustos.
Total, este grupazo oriundo de Massachusetts tiene a su haber una historia plagada de éxito y buenas canciones, lo cual les ha permitido tener todo el reconocimiento tanto de la crítica más acérrima como de los fieles fans que agotan las entradas a sus conciertos y ponen cada lanzamiento a puntear en cuanto listado de rock exista; y no es para menos, ya que 19 de sus sencillos han estado en el top 10 y 15 de ellos en el top 5…qué monstruos.
Surgieron como grupo en el 95, pero fue solo hasta 1998 cuando estalló el primer álbum Godsmack que contenía la primera canción que escuché de ellos, “Whatever”. De ahí en adelante uno solo se encuentra con buena música en cada uno de sus posteriores trabajos de estudio: Awake (2000), Faceless (2003), IV (2006) y The Oracle (2010); esto sin contar con el EP acústico del 2004 The Other Side y el consabido recopilatorio del 2007 Good Times, Bad Times... Ten Years of Godsmack.
¿Canciones recomendadas? Dura tarea pues esta gente tiene la receta para hacer buenas canciones, pero tanto para el conozca a Godsmack como al que no seguramente le sonarían bien temas como “Vampires” de su álbum debut, su primer número uno “Awake”, "Straight Out of Line", "I Stand Alone" y "Re-Align" del Faceless, “Speak” y “The Enemy” del cuarto álbum, y "Love-Hate-Sex-Pain", "Cryin' Like a Bitch!" y "Whiskey Hangover", incluidas en su más reciente placa The Oracle.
A pesar de un posible rumor de ruptura, apalancado en el hecho de que Sully Erna (voz, alma y nervio de Godsmack) lanzara su álbum en solitario lleno de sonidos acústicos y tribales (Avalon de 2010, entre otras qué buen disco), la banda sigue sólida y con ganas de seguirle ayudando a oídos como el mío que están abiertos a escuchar cosas nuevas, pero que no les molesta que traigan consigo sonidos que me recuerden a lo de siempre.
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